En una de esas tardes de intercambios de ideas, confidencias y proyectos, mi amiga Nati propuso hacer éstos ángeles de cara a la Navidad. El cuerpo es una bolsa de tela, de las que venden en los chinos para envolver regalos, pero con un toque especial: un adorno que semeja una tira bordada. La cara es un círculo de 10,5 centímetros de diámetro, relleno de mirahuano, y las alas están hechas de fieltro, cosidas a mano con hilo de bordar y rellenas también de mirahuano. Puedes bordar los ojos y la boca, o bien pintarlos como he hecho yo con rotuladores para tela. Para el pelo yo he utilizado cola de ratón marrón que tenía por casa y, en otros casos, trocitos de una boa de plumas de marabú con las que he conseguido ángeles con aire punkie. Para darles más color, he utilizado hilo de bordar verde o dorado en las alas y cintas de colores para colgarlos... Para pegarlos he usado pegamento de contacto Imedio transparente.
Lo único que tienes que tener en cuenta, si te decides a hacerlos, es que, una vez terminada, debes coser la cabeza del ángel por la parte interna de la bolsa y en la zona superior, para que puedas abrirla y cerrarla con facilidad y rellenarla con lo que tu quieras. Yo les he puesto lavanda y mis amigos varones han decidido colgarlos en sus coches. Ya he hecho y regalado un montón. Es una bonita manera de decirles a las personas que les quieres y de anunciar la Navidad.